...rellenas de jamón, queso manchego y queso Oaxaca (por fin se acabó ese queso). Acompañé con ejotes asados en mantequilla y salsa de soya y arroz. Quedaron supremas, pero hice un batidero, usé mucho aceite y al final quedan muchos trastes sucios.
Vi que había arroz. Eché cuatro puños sobre un traste. Llené el traste con agua. Moví. Tiré el agua. Llené de nuevo. Repetí hasta que el agua no estuviera tan blanca. Dejé reposar el traste con el arroz húmedo. Puse cacerola al fuego con un chorrito de aceite de oliva. Pelé un diente de ajo y lo corté en cuatro partes. Lo puse en el aceite. Moví un poco. Agregué el arroz húmedo a la cacerola. Revolví. Seguí moviendo un rato. Vertí agua hasta cubrir el doble de alto del arroz. Un poco de sal. Moví. Prendí la lavadora y eché jabón. Me enjuagué. Moví el arroz. Fui por mi cesto de ropa sucia. Me enjuagué. Moví el arroz. Separé la ropa blanca y la eché a la lavadora. Lavé manos y seguí moviendo el arroz. Antes de evaporarse piqué una salchicha y la eché a la cacerola. Esperé un rato y le apagué al fuego.
